• #1demayoromaní: Manifiesto con motivo del Día del trabajador/a 2020

    El origen de esta conmemoración se remonta al año 1886 en Estados Unidos. Después de varios días de huelga para reclamar mejoras en las condiciones laborales, entre ellas, la reducción de la jornada laboral a ocho horas, puesto que en las fábricas trabajaban por igual hombres, mujeres, ancianos y niños, y lo hacían más de 12 horas diarias, una jornada que no daba opción a las personas de recuperarse, descansar ni por supuesto, a disfrutar de tiempo de ocio. Todo ello, sumado a los bajos salarios suponía que la vida de los obreros fuera de subsistencia. En Chicago, la fábrica McCormik, se negaba a mejorar las condiciones laborales de sus empleados, y el 1 de mayo la policía disparó contra los manifestantes, varios de los cuales murieron. El cuarto día de huelga, estalló una bomba contra la policía, y 31 obreros fueron llevados a juicio acusados de promover el conflicto. Condenaron a cinco de ellos a morir en la horca, los “Mártires de Chicago”. Como homenaje a ellos, el 1 de mayo se celebra el Día del Trabajador.

    En pleno siglo XXI, el Pueblo Gitano nos encontramos en una situación similar a la sufrida hace dos siglos. La mayoría desempeñamos trabajos en situación de precariedad, con una economía de subsistencia y viviendo en barrios vulnerables con viviendas hacinadas. Ante la situación de emergencia social debido a la crisis sanitaria de la COVID-19, se está utilizando mucho la expresión que nadie quedé atrás, ¿pero qué pasa con los colectivos que llevamos sufriendo con anterioridad la dejadez institucional y el racismos estructural? ¿Cuánta distancia nos separa del resto?

    Desde la Federación Autonómica de Asociaciones Gitanas de la Comunidad Valenciana, queremos seguir con nuestro compromiso social y hacer visible la injusticia social que sufre el Pueblo Gitano en materia de Empleo, por el hecho de ser gitano/a. A día de hoy, existe un porcentaje elevado de personas gitanas que ven mermadas sus oportunidades de trabajo a causa del antigitanismo institucional y social, que evita que las personas gitanas puedan acceder al mundo laboral de forma justa y en igualdad de condiciones. Por todo ello, reivindicamos:

    - Que haya una mejora en el acceso al empleo normalizado y reducir la precariedad laboral en la población gitana.

    - Proteger y fomentar la cultura gitana a través de actividades laborales ligadas a nuestro Pueblo, como la literatura, la música, el baile, el cante, la pintura, la artesanía y la autonomía laboral.

    - Garantizar e incrementar la proporción de población gitana ocupada en actividades de contratación por cuenta ajena.

    - Eliminar la discriminación y el antigitanismo laboral.

    - Aumentar la proporción de trabajadores gitanos y trabajadoras gitanas con una ocupación cualificada y estudios superiores.

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